Las miradas investigativas se enfocan en temas fundamentales como la producción de alimentos, la reconversión energética y la agroindustria azucarera, entre otros.
Los resultados de los grupos del Polo Científico Productivo (PCP) villaclareño responden al desarrollo del territorio, tanto en la esfera económica como social.
Ello influye en la imprescindible transformación empresarial, sin apartarse de aquellos renglones que propician la sustitución de importaciones y líneas exportables.
Temas fundamentales dirigidos a la producción de alimentos, la reconversión energética, la agroindustria azucarera, el enfrentamiento al cambio climático, la salud, la informatización y automatización de la sociedad, y las ciencias sociales y humanísticas despliegan los objetivos esenciales avalados por el Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (Citma).
Gran parte de ellos nutren los 826 proyectos vinculados a sectores estratégicos, que incluyen la sanidad vegetal con el manejo integrado de plagas en los cultivos del frijol, así como la presencia de las especies del complejo Heliothis en el tabaco.
Las miradas investigativas no descuidan la salud animal mediante la aplicación de suplementos minerales dirigidos a la reproducción de los rebaños, como tampoco, las mejoras tecnológicas en la producción de medios biológicos para reducir el uso de productos químicos en la agricultura.
Otro renglón interesante lo aporta la Estación Territorial de Investigaciones de la Caña de Azúcar (Etica), en su amplia diversidad relacionada con la gramínea, a partir de servicios científico-técnicos, productos y tecnologías de alto valor agregado, otras producciones agropecuarias, estudios de suelo y gestión del conocimiento, entre un amplio espectro.
En salud, se siguen estrategias vitales relacionadas con el Programa Materno Infantil (PAMI), las enfermedades crónicas no trasmisibles y el envejecimiento poblacional, en tanto el tema de la vivienda, especialmente la producción local y venta de materiales, figura entre las ramas de mayor dinamismo en el proceso de actualización del modelo económico cubano.
Autor: Ricardo R. González / Fuente: vanguardia.cu
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